De ser la buena.
De ser la última opción.
De los juegos.
De las mentiras evidentes.
De la falsedad.
Uno no puede permitir que lo menosprecien, nadie se lo merece; nadie es mejor que nadie. Una persona debe quererse más a sí misma, aunque ello implique perder muchas cosas, pues perdiendo también se gana. Se gana confianza en uno mismo, se gana el amor y el cariño de quienes de verdad merecen la pena, pero sobre todo, se gana la verdad.